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el parte amistoso no es vinculante en accidente de trafico

¿Es vinculante rellenar el parte amistoso de un accidente de tráfico?

Después de un accidente de tráfico, una de las primeras cosas que las aseguradoras te piden es el famoso parte amistoso. Pero, ¿qué pasa cuando lo rellenas? ¿Lo que firmaste es definitivo? ¿O puedes cambiar de opinión después? Si tienes estas dudas, no te preocupes: aquí te explico de manera sencilla todo lo que necesitas saber.

¿Qué es exactamente el parte amistoso?

El parte amistoso es un formulario que tú y la otra persona implicada en el accidente rellenáis juntos en el momento del siniestro. Es como una versión «oficial» de lo que pasó, donde se detallan cosas como:

➡️ Qué vehículos están involucrados.

➡️ Cómo ocurrió el accidente (o cómo creéis que ocurrió).

➡️ Los daños visibles en los coches.

➡️ Quién iba conduciendo.

¿Para qué sirve? Básicamente, ayuda a las aseguradoras a procesar el caso más rápido. Si ambos estáis de acuerdo y todo queda claro en el parte, no será necesario ir a la vía judicial.

¿El parte amistoso tiene fuerza legal?

Aquí viene la gran pregunta: ¿lo que firmes te compromete al 100 %? Y la respuesta corta es no, no es vinculante jurídicamente, pero tiene mucho peso como prueba. Vamos a explicarlo mejor:

❌ No es un contrato definitivo

El parte amistoso no es un documento legal que determine de manera absoluta quién tiene la culpa. Es una prueba más que se puede aportar, pero no tiene valor probatorio pleno como, por ejemplo, un informe policial o una sentencia judicial.

✅ Es una base importante para las aseguradoras

Las aseguradoras confían en lo que se refleja en el parte. Si ambas partes lo han firmado, lo toman como una descripción válida de lo ocurrido. Sin embargo, si surgen discrepancias o aparecen pruebas que contradigan lo que pone en el parte, las aseguradoras pueden investigar más a fondo o incluso rechazar lo firmado.

🤔¿Qué pasa si te das cuenta de un error después de firmarlo?

Imagina esto: en el momento del accidente estás nervioso, decides firmar el parte amistoso porque parece todo claro, pero más tarde te das cuenta de que algo no cuadra. Por ejemplo:

  • Te equivocaste al dibujar el esquema del accidente.
  • Crees que la otra persona no te contó toda la verdad.
  • Recuerdas algo importante que no incluíste.

 

¿Qué hacer en este caso?
Aunque hayas firmado, puedes impugnar el parte amistoso. Esto significa que tendrás que aportar pruebas que respalden tu versión: fotos, declaraciones de testigos, cámaras de seguridad, etc. Eso sí, ten en cuenta que el proceso puede complicarse y alargarse, así que es mejor intentar que todo quede claro desde el principio.

🗒️ Ejemplo práctico: ¿Y si firmaste algo que luego no parece justo?

Pongamos un ejemplo: estás circulando por una rotonda y otro coche se mete sin cederte el paso. Ambos os detenéis, rellenáis el parte amistoso y firmas, porque no quieres complicaciones. Pero más tarde, al contárselo a alguien, te das cuenta de que quizá aceptaste más culpa de la que realmente tenías.

En este caso, el parte amistoso no es una sentencia definitiva. Puedes contactar con tu aseguradora, explicarles la situación y aportar pruebas para defender tu versión (por ejemplo, fotos de la rotonda o testigos que lo vieron). Eso sí, cuanto antes lo hagas, mejor.

¿Qué ocurre si las aseguradoras no están de acuerdo?

Aunque ambos conductores firmen el parte, las aseguradoras tienen derecho a investigar si sospechan que algo no encaja. Por ejemplo:

  • Si las versiones de los daños en los coches no coinciden con el tipo de impacto.
  • Si una parte aporta pruebas que contradicen lo que se firmó.

 

En estos casos, las aseguradoras pueden recurrir al Convenio de Indemnización Directa (CIDE), que regula cómo se gestionan este tipo de conflictos entre compañías. Si no llegan a un acuerdo, el caso podría acabar en los tribunales.

Conclusión

El parte amistoso no es vinculante en un sentido jurídico absoluto, pero tiene mucho peso como prueba para las aseguradoras. Por eso, es importante que lo rellenes con cuidado y que, si más tarde detectas algún problema, actúes rápido para corregirlo.

Recuerda que, desde el primer momento del accidente, cada decisión que tomes influirá en el éxito de tu reclamación. La ayuda de un abogado especializado te proporcionará la tranquilidad de saber que cuentas con el respaldo necesario para enfrentar a las aseguradoras y defender tus intereses y reclamar la indemnización que mereces. Si has sufrido un accidente, no dudes en contactarnos sin compromiso haciendo click aquí.

Miguel Orellana

Abogado experto en Accidente de Tráfico, Seguros y temas Bancarios.

Autor de los siguientes libros "Factores de éxito para ser un Mediador de Seguro" y "Decisiones Ordinarias para ser una Persona Extraordinaria".

CEO de Jurisleg Abogados & Asesores.